domingo, abril 09, 2006

La extraña sensación de no pertencer

Pude desaparecer, pude decir que no...

Pero no lo hice. Yo me quedo aquí.

Quizás al final mi cabeza se encuentre con aquel oasis. Este trayecto no es fácil, ir hilando a lo largo del camino cierta continuidad, otorgando existencia a mi existir, desafiando y restructurando mi sentir.
Mientras tanto, no hallo descanso.

Y si, a veces no puedo con la soledad. Mi fragilidad es más definitiva de lo que pienso. Todo me puede, no logro despegar.