jueves, junio 30, 2005

Manifiesto

Son de público conocimiento los abusos ejercidos sobre las comunidades indígenas desde los tiempos de la colonización, no siempre oficializados, pero si latenetes en el saber popular. Sin escrúpulos, los crueles mercenarios encargados de llevar a cabo lo que llamaron "colonización" utilizaron métodos turbos e indignos, deshonrosos tanto para el verdugo como para el ejecutado, para destruir una civilizción entera establecida desde tiempos inmemoriables. Toda una cultura fue silenciada y condenada al olvido.
Non solum, sed etiam fuerons los suficientemente cobardes como para ocultar y tergiversar las injurias cometidas hacia la pachamama y sus hijos, hechos viles y maquiavélicos, solo atruibuibles a canallas como Cristóbal Colón y Hernán Cortés. En nombre de Dios, realizaron matanzas y persecuciones indiscriminadas, dieron rienda suelta al salvajismo, e hicieron subordinar a seres humanos, excusándose con justificaciones discriminatorias respecto de sus forma de vestir, de sus costumbres, aprovechándose incluso de la ingenuidad de los nativos y su desapego a las cosas materiales ("Ellos de cosa que tengan pidendosela jamás dicen que no; antes, convidan la persona con ello (...) quieren sea cosa de valor, quien sea de poco precio, luego por cualquier cosica (...) por ello se van contentos", Carta de Colón).
Sin embargo, gente rescatable y racional decidió escribir la nueva historia de las Indias, desde una perspectiva más humana, en relación con el trato a los indios. Bartolomé de las Casas y Bernal Díaz del Castillo intentaron una suerte de resistencia al abuso de poder sobre los indígenas. Las Casas defendía principalmente al "buen salvaje", un indígena cubierto y criado bajo la luz cristiana, digamos un indígena convertido en español. No pretendían que tuvieran otro temor más que a Dios, es deciar, al Rey, por supuesto español. ¿Hasta qué punto Las Casas puede ser considerado un redentor de las comunidades indígenas, un guía, si tenemos en cuenta que lo que lo diferencia de los conquistadores es la forma de ejercer el poder? Estamos ante una nueva forma de control: esta vez cultural, ideológica, psicológica, no ya física.
De la misma forma, Bernal Díaz del Castillo denuncia los maltratos y la violencia ejcercida, constituyendo un personaje atrevido para la época, polémico. Nadie duda de su aporte del tipo moral cristiano a la cuestión, sin embargo resulta en cierto modo insignificante e imposible de transformar en una acción definitoria de cambio. Sin contar además la hipocresía implícita que recubre el hecho de que haya sido parte del ejército de Cortés, y por lo tanto, de la impunidad ejercida sobre el indígena.
Denunciamos: la complicidad de la historia oficial en la degradación del indígena y la impunidad frente a los crímenes cometidos. Si bien fueron acontecidos hace ya más de cinco siglos, hoy en día se perciben las cicatrices que han dejado las espadas conquistadoras sobre las Naciones lationamericanas: la discriminación, la falta de identidad propia y del sentido de unidad son las bases en las que se alza una sociedad perdida y condenada a su ineficiencia y fracaso como tal.
Es idiota sedur pretendiendo que somos europeos cuando no lo somos, seguir viviendo en un tiempo que no nos es propio; debemos recuperar la dignidad, los valores; la memoria debe quedar latente en nuestro conciente colectivo.
Incitamos al respeto y la reinvindicación de las comunidades aborígenes, mayoritarias en Américalatina, aún siendo ignoradas. Su cultura es tan válida y relevante como la italiana, la española, la alemana, etc, todas introducidas en nuestro continente de forma violenta y autoritaria; incluso su cultura es más primordial, por ser la primera, la dueña de esta tierra, tanto hace cinco siglos como en los siglos venideros.


Esto se valuó en un 9+.

martes, junio 28, 2005

Breathe...

Breathe, breathe in the air
Don't be afraid to care
Leave but don't leave me
Look around and chose your own ground
For long you live and high you fly
And smiles you'll give and tears you'll cry
And all you touch and all you see
Is all your life will ever be

Run, run rabbit run
Dig that hole, forget the sun,
And when at last the work is done
Don't sit down it's time to dig another one
For long you live and high you fly
But only if you ride the tide
And balanced on the biggest wave
You race towards an early grave.

Se hizo la luz!
Y buen, Pink Floyd... se apagó la luz...
Proximamente, el manifiesto...

sábado, junio 25, 2005

Traición

(Nota: lo que escribiré a continuación es producto de la influencía de "La insoportable levedad del ser")

"Ha llegado el momento más terrible, pero también el más esperado. Ha llegado el momento de la traición", dijo. No estoy segura de hasta qué punto esas palabras encerraban una verdad a punto de revelarse, pero si sé que en ese momento las sentía. Las sentía arraigadas en lo profundo de su ser, cada fibra de su cuerpo palpitaba aquel especial vocablo: Traición. Le inspiraba temor, pero resultaba tan placentero que estaba dispuesto a seguir adelante cuanto fuera necesario.
Qué es la traición? Es faltar a una promesa o juramento? Explícito o implícito? La infidelidad es traición? El engaño es traición? Nada de eso, en verdad no existe la traición. Nadie le rinde cuentas a nadie, todos somos corruptibles y el confiar implica saberse de antemano traicionado.
De todas formas, se encontraba ahí, parado, frente a esa puerta que tantas veces había cruzado con indiferencia, y sentía el poder que le brindaba el ser un traidor. Mejor dicho, esa antesala de la traición, cuando todavía no es real, todavía se está gestando en la mente, y el la repite una y otra vez, la disfruta, la goza. Entró. Lo estaban esperando. "Me voy, lejos". Silencio.
Ella lo abrazó, muy fuerte, intentando retener su imágen como último recuerdo. Sabía que era en serio, sabía que su hermano no jugaba. Entonces lo dejó ir. Y no lo sintió como una traición, claro que no estaba destinada para ella. El dejó la carta sobre la cama del cuarto principal, y salió.
Lo había hecho. La adrenalina ya corría por sus venas, era la traición. Pronto estarán leyendo su carta, su madre se derrumbará en los brazos de su padre, llorando. Su padre, firme como siempre, pensará dónde buscarlo. Pero ya será tarde para ese entonces, no le preocupa en absoluto.
Nuevamente frente a otra puerta que había cruzado infinidad de veces como si nada, excepto la primera vez. Aquella había sido si, especial, única. Luego de la tercer salida, la acompañó a su casa; le dió un beso en el umbral, pero ella lo arrastró hacia adentro. Vertiginosamente, se vió del otro lado, envuelto en besos y caricias de toda clase. Y en ese momento le gustó, en ese momento todo era felicidad, todo era futuro. Pero el futuro había llegado, y no había resultado ser lo que prometía. Por eso huía, solo buscaba su futuro perdido, sabía que allí no estaba, y que tampoco lo vendría a buscar.
Se agachó, e introdujo una carta por debajo de la puerta. "Perdón", decía. A ella no quería lastimarla, por eso no entraba, desafiante, a torturarla con las razones de su partida. Solo se iba, se alejaba, en la oscuridad cerrada de la noche.
Es esto traición? Si, lo es. Pero habría que sacarle el tono peyorativo al término.

martes, junio 21, 2005

El sol

Me gusta el sol de los domingos de invierno en la casa de mi abuelo. Iluimina el jardín, destaca el color verde del pasto, el rojo de las tejas y los ladrillos, el blanco de las flores. El aroma de la carne asándose sobre las brasas crepitantes. El murmullo de mis padres, mis tíos y mi abuelo. Mi hermano pateando la pelota, jadeando, corriendo de un lado a otro con el perro.La sensación de paz, de oasis en el medio de la vorágine, de rato enteramente dedicado al ocio. Las páginas del diario recién impresas, y aquella nota que casualmente se relaciona profundamente con algo que estoy viviendo, y me impresiona. El horóscopo y soltar la imaginación, dejarla pasear por entre los días, las horas, los minutos de la semana que comienza. El frío penetrante, que permite idealizar aún más al sol, que nos brinda sus rayos, gratis, e ilumina mi pasado, mi presente y mi futuro. El almuerzo campestre, el pan, la ensalada y la sal caminando por la mesa. Las historias de mi tía hacen el rato aún más ameno.
Me gusta también el sol de octubre, que se desliza por las ventanas del claustro de geografía. Dibuja sus reflejos en el piso e inunda de prosperidad el ambiente. Seguir caminando, llegar al patio y reencontrarse con aquel sol, cara a cara, luz a luz. Una conversación distendida, algo dulce para merendar y alguna bebida. Sentarse y contemplar el tiempo, recordar viejas andanzar por ese mismo lugar y planear otras tantas, futuras. Salir temprano y saberse dueño de un tiempo nuevo, regalado, que no se suponía que debía estar ahí, pero que está. Las palomas de plaza de Mayo, la pirámide casi celestial y los edificios antiguos alrededor, reviviendo el pasado colonial.
Me gusta, además, el sol de verano en plaza Francia. El aroma de los sahumerios más exóticos, los colores vívidos, la gente haciendo de aquel lugar una fiesta. El puente, uniendo dos caminos, elevándose entre los autos, coqueteando con la muerte. Facultad de Derecho, imponente, alzada entre la nada, representando la rectitud, la sociedad civilizada, velando por la justicia para permitirles al resto de los mortales habitantes de esta tierra disfrutar de su descanso en paz. Seguir andando, recorriendo los pasillos que exhiben las obras maestras de grandes pintores; la solemindad de museo brinda el marco perfecto para la expresión de hombre, tornándola exitante, y a la vez prohibida. Avenida Alcorta, al fondo. Autos último modelo, acompañando esa realidad tan porteña, tan irreal. Y una cicatriz, que dejó de sangrar, pero que permanece inmutable en el tiempo, inalterable, y que ya ni pretendo borrar.

lunes, junio 20, 2005

Mesa de física

Situación: Diciembre, 2004. Puerta del colegio. Mesas de exámen. Probablemente mesa de exámen de física. Deby, la guitarra, un anotador. "Escribite algo, cualquier cosa". Y salió esto:

Cinco amigos, un bate de béisbol, qué puede suceder? Tres opciones:
1) Se ponen a jugar en la calle Bolívar, quien pierde debe correr a Plaza de Mayo, sentarse, tocarle la cabeza a un pelado, saltar y volver.
2) Uno le pega a otro, su cabeza sangra. La culpa comienza a invadirlo, "Está muerto!", gritan, y eso lo vuelve loco. Arrebata la pistola del policía de la esquina y se suicida.
3) El latin-lover del grupo lo lo usa como micrófono y se pone a entonar la balada más melosa de Luis Miguel para la muchachita de remera verde que acababa de llegar. Si bien no tenían una relación amorosa, se dejan llevar por el momento romántico. y el le propone casamiento.
En verdad, nada de esto ocurre. Solo se quedan hablando. Y esperando. Siempre esperan. Qué gente aburrida los ex alumnos del Nacional!

jueves, junio 16, 2005

Blah

You would say anything
And you would try anything
To escape your meaningless
And your insignificance
You're uncontrollable
And we are unlovable
And I don't want you to think that I care
I never would, I never could again
Why can't you just love her?
Why be such a monster?
You burn me from a distance
Your brain needs some assistance
But I'll still take all the blame
'Cause you and me are both one and the same
And its driving me mad
And its driving me mad
I'll take back all the things that I said
I didn't realize I was talking to the living dead
And I dont want you to think that I care
I never would, I never could again
You would say anything
And you would try anything
To escape your meaningless
And your insignificance

"Escape", del disco debut de Muse, Showbiz. Disco espectacular si lo hay... Y canción espectacular también.

Día interesante el de ayer, quizás más tarde haga algún comentario al respecto. He recibido 'La insoportable levedad del ser' que, según mucha gente, me va a cambiar la vida. Eso me gustaría.

martes, junio 14, 2005

Jugar o no jugar...

El último día de mis dulces dieciseis trajo consigo una suerte de iluminación; hacía mucho tiempo que no sentía aquella sensación, esa especie de explosión interna, casi comparable al placer producto de algún acto sexual: la perfecta combinación entre deseo, temor, impaciencia; se van conjugando, retroalimentándose; y, finalmente, aquella dulce liberación de toda esa energía acumulada. En fin, me encontraba yo en la tercer clase del día, correspondiente a la materia Psicología. La profesora, Marilú Castillo, nos soprendió con una clase deslumbrante, tal como sucede en ciertos instantes milagrosos, en los momentos en los que los planetas se alinean de una particular forma, con Mercurio en Venus y el Sol en Cáncer. Los temas eran diversos: en 40' habló sobre las zonas erógenas como lugares donde se acumula el líbido, la adaptación versus 'el hacer lo que se me canta', tableros de ajedrez y de otro juego extraño del cual no recuerdo el nombre, pero que se caracterizaba por tener reglas tan complicadas que solo jugándolo era posible aprenderlas, la diferencia entre quedarse libre y repetir, la película 'The Wall', el futuro. El futuro. Aquello fue el disparador para que en mi se produjera aquella descarga indefinida de placer y temor, aquello fue lo que hizo comenzar en mi una cadena de pensamientos acompañados de emociones muy intensas, aquello fue lo que inició la sacudida de mi alma.
Qué es para vos el futuro? Se atrevió a preguntarme. Yo, medio desconcertada, respondí algo semejante a que el futuro eran las aspiraciones, las ilusiones puestas en un tiempo por venir de una persona o un grupo de personas. Se mostró feliz con mi respuesta, hizo hincapié en mi utilización de la palabra 'ilusiones', y continúo preguntandome si me era fácil pensar el futuro, mi futuro. Decididamente, si, me es fácil pensar el futuro. Lo que es difícil es llevarlo a cabo. Y nuevamente otra pregunta, para este punto ya sentía que estaba siendo analizada por la mujer, pero me encantaba que así fuera, me impulsaba a ir más allá con mi pensamiento, diciendole cada vez más sobre lo que pensaba del futuro y cómo se relacionaba con la realidad. Era un círculo vicioso, que no conducía a ningún lado visible, pero no me importaba, yo seguía en la rueda, formulaba mis teorías sobre la dificultad que se presenta al intentar combinar las ilusiones de cada uno con lo que nos rodea, sacar de nuestras cabezas eso latente y materializarlo, pero en la cabeza, está solamente la mente? No, está nuestra razón, nuestros sentimientos, la gente que nos rodea Ahh Y lo difícil está en poder congeniar eso entre todos los miembros de la sociedad en que vivimos, para que todos cumplan con el futuro que pensaron. Y ahí me detuve. Di cuenta de mi error antes que ella me lo marcara: ya había considerado al mundo dentro de nosotros mismos, no podía resultar difícil hacer congeniar a nuestras expectativas con el, ya que ellas estaban inmersas en el. Grave error. Gravísimo error. Marilú notó mi error, y luego comentó que había sacado a relucir la idea de sujeto fuerte, omnipotente, del sujeto cartesiano o kantiano, que puede controlar a su mundo. Mientras hablaba, yo estaba en éxtasis, la escuchaba solo a ella, estaba a punto de revolucionar mi pensamiento para siempre... y lo hizo. Finalmente sus palabras me alcanzaron, entraron en mi alma y la movilizaron; y se quedaron ahí, aguardando para ser desgranadas luego.
Lo cierto es que tengo una concepción del hombre como ser fuerte, decidido, como centro del universo, pero contiene ciertos matices y desde hace un tiempo está empezando a debilitarse cada vez más. Soy yo y mi circunstancia, o mejor dicho, soy mi circunstancia y yo. El mundo ya estaba antes de venir, y el mundo va a estar aún cuando me vaya. Este entorno me condiciona, si, pero de qué manera? Esto fue la cumbre de mi revolución personal: puede influir en mi como una tablero de ajederez, en donde todas la reglas y los papeles disponibles para jugar están establecidos de ante mano, y en donde lo único que elijo es jugar o no jugar; o puede ser un tablero de aquel otro juego, en el cual nada está dicho, por más que existan reglas y papeles, la trama entre ellos es demasiado compleja, entonces se pierden, y al final, yo termino decidiendo qué reglas seguir, qué papeles tomar, dentro de los límites de mi tablero, pero con toda la libertad que implica el poder armar mi propio juego. Entonces solo hago eso, solo juego.

domingo, junio 12, 2005

Introducción

Me obligan a publicar una primera entrada, así que esto es solo eso: una primera entrada...
Ya vendrán lluvias suaves.